Happy Navidad...

Cortesía de nuestrascosas.tv.

El niño del ukelele

La verdad es que a este niño lo descubrí gracias al programa Sé lo que hicisteis. Me encantó nada más verlo. Días después Listo Entertainment  me amplió información. Desde ese momento he de confesar que me declaro fan incondicional de la criatura. Qué habilidad musical con solo 5 años, qué gracia, qué risa más contagiosa.

En estos días en los que se supone "todos hemos de sentir el espíritu de las fiestas navideñas", paso de campañas del Cortinglés y Codirniu, y me quedo con la risa de este niño. Esto sí me hace sonreir.

Adorable

No seamos agelastas II

Pues eso. No seamos agelastas!! Hagamos el favor de reir, que es gratis, rejuvenece la piel, ayuda a eliminar toxinas y hasta adelgaza... Bueno, es cierto que quizás habría que tener un ataque de risa de 2 o 3 días para acabar notando algo en la báscula, pero adelgaza.

Y para facilitarnos la tarea de reir, qué mejor que "El Gran Libro de la Cinefilia".

Más información en http://listocomics.com/wp-content/uploads/2009/07/dossierprensa-granlibrodelacinefilia.pdf

Piazzolla en Gdansk

Piazzolla en Gdansk from Eva Roig on Vimeo.

Este momento mágico sucedió en un restaurante de Gdansk, Polonia, llamado Mon Balzac, a finales de septiembre de este año. Lo llamo mágico porque Piazzolla me entusiasma, y realmente me sorprendió que me dieran Libertango de postre, no incluido en la carta, en Polonia.

Mentiras vs engaños

A menudo utilizamos estas dos palabras como sinónimos. Y no lo son, no exactamente. Según la RAE, mentir es

Decir o manifestar lo contrario de lo que se sabe, cree o piensa

mientras engañar sería

Dar a la mentira apariencia de verdad; Inducir a alguien a tener por cierto lo que no lo es, valiéndose de palabras o de obras aparentes y fingidas.

Mentir mentimos todos, y quien diga que no, miente. House dixit. Mentimos desde el "Buenos días" a la vecina insoportable del quinto, mentimos al sonreir al compañero de trabajo por un comentario que él cree gracioso, y así seguimos todo el día hasta que nos vamos a dormir. Son mentiras sociales, admitidas por todos, que facilitan la coexistencia, que no convivencia. Mentiras blancas.
Pero engañar lleva implícita mucha más mala leche que mentir. El engaño es más elaborado, más meditado, y justo eso, el tiempo que se invierte en su maquinación, es lo que marca la diferencia con la mentira. Una mentira se te puede escapar, un engaño no.

Y después de haber estado un rato pensando sobre estos conceptos, aún no sé ponerle nombre a lo que me pasó el pasado mes de agosto. Aún no sé si fue mentira o engaño, propio o ajeno.

No seamos agelastas

Hay personas a quienes admiro por su inteligencia, a las que estimo por su honestidad, pero con quienes no me siento a gusto: censuro mis comentarios para no ser mal interpretado, para no parecer cínico, para no herirlas con una palabra demasiado leve. Ellas no viven en paz con lo cómico. No se lo reprocho: su agelastia está profundamente anclada en ellas y no lo pueden remediar. Pero yo tampoco puedo remediarlo y, aun sin detestarlas, las evito de lejos.

Milan Kundera
El telón

Hace ya unos días que ando buscando un término para definir la incapacidad para reir. Una vez más ha sido Kundera quien me lo ha brindado. Agelasta. Tomada del griego, viene a significar: el que no sabe reir, el que carece de sentido del humor. En realidad, fue François Rabelais, escritor, médico y humanista francés, quien adjudicó el nombre de la piedra en la que descansó Deméter en su búsqueda de Perséfone a una raza de gigantes que no conocían ni la risa ni el alcohol en su novela Pantagruel. Kundera menciona a Rabelais en El arte de la novela y en El telón. Recomiendo la lectura de ambos, eso sí, con la neurona bien despierta.

El motivo de esta búsqueda surge de la mera observación del entorno. Tengo la sensación de que la gente ríe poco. O nada. No sé si se debe a la falta de motivos para hacerlo o a cierta incapacidad, esto es, la mencionada agelastia. Veo caras largas en el trabajo, en la calle, en el bus. Parece que la risa ofenda. Hasta la sonrisa escuece. Pero si reir es de las pocas cosas por las que no hay que rascarse el bolsillo. Y podemos, casi debemos, reir de lo cómico y de lo trágico, de nosotros y con nosotros.

Riamos, pues, aun cuando nos llamen locos.

Domingo

Hoy es domingo. Y mañana lunes. Eso no falla, de momento.
No sé por qué los domingos son días que invitan a la morriña, a la pereza, a añorar al ausente, a preparar la mochila para toda la semana. Lo malo del domingo, sin duda, es saber que faltan cinco días para que llegue el viernes. Lo peor del domingo es saber que cuando llegue el próximo estarás pensando lo mismo.

Propongo una copa de Oporto, esta versión de Love is a losing game

http://open.spotify.com/track/7itkDorwUcVBt8n8aQfpFH

y un poco de poesía


Enamorarse y no

Cuando uno se enamora las cuadrillas
del tiempo hacen escala en el olvido,
la desdicha se llena de milagros,
el miedo se convierte en osadía,
y la muerte no sale de su cueva.

Enamorarse es un presagio gratis,
una ventana abierta al árbol nuevo,
una proeza de los sentimientos,
una bonanza casi insoportable,
y un ejercicio contra el infortunio.

Por el contrario desenamorarse
es ver el cuerpo como es y no
como la otra mirada lo inventaba,
es regresar más pobre al viejo enigma
y dar con la tristeza en el espejo.

Mario Benedetti

Con todo esto ya completamos el domingo. Si ha de ser un asco de día, que lo sea comme il faut.

David Cerný - Video

David Cerný

David Cerný (Praha, 1967) es probablemente el artista checo contemporáneo más controvertido del panorama europeo. Ante lo difícil que resulta ponerle nombre a su estilo, e incluso a su especialidad artística, he consultado diversas fuentes y he encontrado la respuesta en una entrevista que concedió a cafebabel.com.

Entrevistadora: ¿Cómo se autodefine usted? ¿Artista, performador o activista político?
David Cerný: Espero poder ser un buen escultor con el tiempo.


En mi opinión, es un provocador. Un escultor provocador, si él lo prefiere. Sus obras no dejan lugar a la indiferencia. Habrá quien las ame y quien las odie, pero dudo que nadie se quede igual después de verlas.
En mi séptima visita a Praga descubrí varias de sus obras. Solo cuatro de ellas. Mi balance fue: tres me gustaron, una no.

Los bebés de Kampa

Hombres orinando sobre un mapa de la República checa

Los bebés de la torre de TV de Zizkov

San Wenceslao con el caballo muerto y colgado del techo, en el pasaje Lucerna.

Ahí os lo dejo. Que cada cual decida qué le parecen. Y cuando visiteis Praga no perdáis la ocasión de verlas en vivo. Evidentemente, la percepción cambia.

Por cierto, ¿cuál fue la que no me gustó?

Aquí os dejo su página web www.davidcerny.cz.

Béla Fleck & The Flecktones

S'autodescriu com el "banjo excèntric", adjectiu que s'escau perfectament a la seva música, una peculiar barreja entre bluegrass, funk, world music, pop i jazz. Però l'excentricitat de Béla Fleck no ho és en sentit estricte perquè, a diferència d'altres genis, defuig tota pretensió. El so que ha creat aquest instrumentista i compositor de Nova York s'explica per un amor per la música molt obert de mires i per la voluntat d'arribar a un major i més divers públic, que pot compartir en un mateix concert un petit instant de felicitat. Amb aquesta filosofia, porta des de 1989 al capdavant d'una banda incendiària, nominada en 21 ocasions als Grammy, guanyadora de 4 d'aquests guardons i famosa per les seves eternes gires, de 200 concerts en un mateix any. Crítica i públic s'han rendit als peus d'aquests quatre pesos pesats de la fusió, que han compartit aventures amb col•laboradors de la talla de Shawn Colvin, Jon Anderson, John Medeski i Adrian Belew. Han demostrat que és possible demolir fronteres a cops de determinació i autenticitat.

Intèrprets
Béla Fleck, banjo
Jeff Coffin, saxo
Víctor Wooten, baix
Futureman, percussions

L´Auditori
dijous 05/11/2009 - 20:30


Preu: 30€

Font: http://www.auditori.com/

Papeleras

Señores, vayan escogiendo papelera porque mierda hay mucha y no sé si vamos a dar abasto.

Paren el mundo...

Dios bendito del amor hermoso! En otras palabras, jodeeeeeeeeeeer! Vuelvo del trabajo y me encuentro con el escándalo de Santa Coloma y el escándalo de las comisiones de CIU (el famoso 3%). A esto no es difícil ponerle nombre. De hecho, sobran: vergüenza, bochorno, asco, náusea, decepción... No, decepción no. De quien no esperas nada no te puede decepcionar.
Voy a empezar a hacerme una lista de paises a los que podría exiliarme. Es difícil hacerla sin caer en errores. En todas partes cuecen habas (i aquí mongetes i botifarres), pero aquí tenemos una olla de tamaño industrial a fuego vivo. Se supone que cuando nos convoquen a las urnas tendremos que ir. ¿A hacer qué? ¿Votar? ¿A quién? ¿Al menos chorizo de toda la charcutería? Paso, me hago vegetariana.
Y, de paso,voy pensando en cambiarme de supermercado. Pero será difícil encontrar uno sin productos contaminados. Casi que también paso de supermercados y me pongo un huerto y compro dos gallinas y una vaca.
PS: No sé si he de pedir permiso para poner el dibujo de mi querida Mafalda. Si es así, que alguien me lo diga y lo hago.

My safe way home

Medicalizar la vida

¿ Por qué tanta gente medicaliza su vida? Transformar la tristeza en un diagnóstico no es solo responsabilidad de los galenos. Cada día más personas buscan la solución a sus problemas diarios en la consulta médica. Esperan de la visita una "receta mágica" que les alivie de la miseria de sus realidades cotidianas. Y, evidentemente, no la encuentran. Porque no existe. Entonces sienten una enorme frustración que acaba pagando, sin motivo alguno, el blanquibato que tienen delante.
¿ Por qué no intentan sentarse en una habitación a solas, sin televisión, ni radio, ni ordenador, ni otros congéneres, simplemente solos, para pensar en lo que hay en sus vidas? Lo que hay de bueno y de malo. Y después de identificarlo, intentar entender qué puede cambiar y qué no. Y ver qué pueden hacer para cambiar lo que puede cambiar. Y tomar decisiones personales y firmes para cambiar lo que puedan, sin esperar que otros, por ejemplo, el blanquibato, lo haga por ellos.
¿ No pueden aceptar que la solución para muchos de sus problemas solo depende de su capacidad para solucionarlos? Algunos no tienen capacidad. La mayoría ni se esfuerzan en buscarla.
Mejor pido hora. Para hoy. Para ya. Y que me lo solucionen todo ya!

Vetusta Morla

Me encanta esta canción. Me trae muchos recuerdos. Aún así me sigue gustando.

Intentos

Estoy intentando insertar un video de Vetusta Morla, Al respirar, pero no me aclaro. Y quien me podía ayudar ya no está.

Primer día

Qué difícil es ponerle nombre a muchas de las cosas que nos pasan. Que nos pasan en el día a día o que nos pasan por la mente. A veces, cuando empiezan, las etiquetamos rápidamente. Les asignamos un adjetivo que las describa o las bautizamos con un pomposo sustantivo. Pero el tiempo pasa y las cosas cambian. Y las definiciones previas también pasan. Y nosotros, que queremos tener las cosas más o menos claras, nos sentimos perdidos. Pero, no era...? No, no era. O estaba siendo, pero dejó de ser. O no estaba siendo y solo tú creías que era.